Flores de carnaval!!

 

Lo prometido es deuda, hoy toca una receta tradicional, un dulce típico gallego de esta época del año y es que empieza el carnaval!!

 

 

El año pasado descubrí las orejas de carnaval,  un dulce clásico entre los clásicos de la repostería gallega junto con las filloas (creo que en breve os traigo esta receta!). Pero no sólo las descubrí, no… Me volví loca comprando  orejas, todos los días las compraba, están TAN BUENAS!!

 

 

Hoy os traigo la receta de las flores de carnaval, son tan bonitas, están tan crujientes, el anis les da un sabor tan especial... Son deliciosas!! Engordan sí… No os lo voy a negar… Pero como sólo se comen en carnaval, pues una vez al año no hace daño, no??!! ;)

 

 

Que no os asuste lo más mínimo hacerlas, yo creía que serían de elaboración compleja pero son muy muy fáciles de hacer, sólo nos hace falta un molde especial de flores (lo encontrareis en ferreterías).

Vamos con la receta!

 Flores de carnaval

Ingredientes( salen aprox. 12 flores):

 

      ·         200 g de harina (he usado harina especial repostería)

·         250 ml de leche ( a temperatura ambiente)

·         2 huevos L

·         30 ml anís

·         ralladura de 1 limón

·         una pizca de sal

·         aceite de girasol para freir

 

Paso a paso:

1.       En un bol mezclamos todos los ingredientes, con una batidora nos aseguramos de que no quedan grumos en la mezcla (más fácil imposible, no?)

2.       Ponemos a calentar el aceite (introducimos el molde) en una cazuela de esas que son muy bajitas de altura, así ahorramos aceite porque con un litro nos llega. Primero poned fuego fuerte (en mi cocina es  9) y cuando haya cogido temperatura bajad a fuego medio (en mi cocina a 6).

 

 

3.       Cuando esté caliente introducimos el molde en el bol con la mezcla pero sin llegar al borde (ESTO ES MUY IMPORTANTE!!  Así la flor se desprende fácilmente). Dejamos escurrir un segundo e inmediatamente introducimos el molde en el aceite, pasados unos segundos movemos enérgicamente arriba y abajo y se desprenderá la flor.

 

Aunque sale borrosa, en esta foto veis hasta dónde hay que meter el molde en el bol de mezcla.

 

 

4.       Tendremos preparado un plato con papel absorbente, en él pondremos las flores ya fritas para sacar el exceso de grasa y espolvoreamos con azúcar.

 

 

Consejos:

El tema de la temperatura idónea lo veréis sobre la marcha, yo tenía el aceite demasiado caliente y la primera flor se chamuscó, literalmente, en dos segundos en el fuego.. Aparté el aceite del fuego un minuto, para que enfriara, y ya me fueron saliendo bien. Aquí la muestra de mi flor chamuscada, bonita de forma eso sí, pero carbonizada de sabor...

 

 

Es importante que el molde no pierda temperatura, yo lo que hago es dejarlo en el aceite mientras saco la flor anterior y le echo azúcar.

Comedlas recién hechas cuando ya no estén calientes, están más crujientes y, por lo tanto, más ricas (aquí hay mucha humedad y si esperáis mucho se reblandecen).

Espero que las disfrutéis tanto como yo!!!

Estoy enlazando esta receta a la fiesta de enlaces del blog Personalización de Blogs